Cuando tenemos la suerte de escaparnos a la casa de campo que tiene mi madre en un pequeño pueblo de montaña, mis #nativosdigitales disfrutan ayudándole a la abuela a recoger nueces (una tarea maravillosa para educar en el asombro), a barrer la terraza y retirar las hojas secas que lleva el viento, a cuidar y regar las flores…

Estas pequeñas actividades propias del campo se han convertido en la forma de rascarle de vez en cuando a la abuela y de una forma cariñosa la paga de la semana que aún se cuenta en céntimos…pero ellos tan felices.

Y precisamente esta mañana conocía una iniciativa de un banco – con sede en Nueva Zelanda que se llama ASB Bank – que ha ideado una curiosa hucha digital con forma de elefante que permite a los más pequeños de la casa aprender lo que es el ahorro de una forma simpática.

Clever Kash, que así se llama la hucha, consiste en una aplicación que los padres se descargan en sus móviles y desde la que pueden enviar a sus hijos dinero en cualquier momento sin hacer uso del dinero metálico.

Cuando los padres envían dinero al elefante se le encienda la pantalla que tiene en su tripa y muestra el importe que contiene la hucha. Una hucha que nunca habrá que romper cuando se quiera conocer lo que contiene dentro como hemos hecho muchos de mi generación.

Siempre es complicado explicar a los niños el valor de las cosas, o de dónde procede el dinero o porqué cuando vas a un cajero puedes sacar dinero. También es muy habitual tener que explicar porqué no se puede comprar todo lo que ellos quieren a pesar de que vean en tu monedero dinero en efectivo. No es cuestión de tener o no tener, sino de priorizar y medir los gastos y necesidades.

En definitiva, con iniciativas como estas del elefante, se trata de ayudar a que desde pequeños les mostremos la importancia de saber ahorrar o el valor que tiene el dinero.

Yo, como madre, veo detrás de este tierno elefante una buena estrategia de marketing del banco para captar nuevos clientes pero me he querido quedar con la idea de fondo. Esta hucha digital puede ser una excusa para educar en el esfuerzo, en la espera por conseguir euro a euro ese patinete que tanto ansían y de esta manera valorar lo que cuestan las cosas.

Y sobre todo me sirve para ir enseñándoles lo que ya es una realidad y que os contaba en un post reciente Lo que conocías ya es historia. Crecen a diario los pagos a través del móvil, aparecen infinidad de nuevas aplicaciones que permiten hacer transacciones sin necesidad de los bancos, aumentan las compras por internet.

Nuestros hijos debido a las nuevas tecnologías han cambiado la forma de hacer casi todo: estudiar, comunicarse, divertirse, comprar y porqué no, han cambiado la forma de ahorrar.

Prueba de ello es esta Campaña de Clever Kash.